Visitar el balneario Gellert: ¡Así fue mi experiencia!

¿Te vas a Budapest? No olvides meter el traje de baño en tu maleta porque vale la pena relajarse en sus aguas termales, por ejemplo haciendo una visita al balneario Gellert.

Visitar el balneario Gellert es una de las mejores experiencias que puedes vivir en Budapest. Su arquitectura me dejó boquiabierta y la calma que ofrecen sus piscinas termales es un regalo.

Para mí, la cultura de balnearios de Budapest es uno de los puntos fuertes de la ciudad además de su interesante barrio judío, la belleza del Parlamento y los paseos junto al Danubio (o un crucero por sus aguas).

A continuación te cuento cómo fue mi experiencia en el balneario Gellert y todo lo que debes saber antes de visitarlo.

Características del balneario Gellert y por qué visitarlo

El balneario Gellert es uno de los balnearios más famosos e importantes de Budapest. Está en la orilla de Buda, a los pies de la colina Gellért, y puedes llegar desde el centro de la ciudad a pie o en transporte público.

Antes de ir, había leído que el edificio art nouveau donde están el balneario y el hotel Gellért es una pasada pero, guau, ver la fachada de cerca me impresionó un montón.

Al llegar (hay un acceso independiente a la entrada del hotel), la cosa no hace más que mejorar. La decoración de las instalaciones es un espectáculo, empezando por el vestíbulo. La vista se te irá enseguida a los techos, las esculturas y las paredes cubiertas con mosaicos.

¡Hasta la zona de las duchas es una obra de arte! ¡Ya lo verás! Después, podrás relajarte en sus seis piscinas termales, a una temperatura que va desde los 34 hasta los 40 grados.

También las salas donde están las piscinas termales tienen una arquitectura preciosa. En ellas vivimos unos minutos de paz total mientras nos dejábamos ir y nos concentrábamos en los techos abovedados y los mosaicos.

Aunque la parte más impresionante es la de la piscina cubierta. Aquí no hay agua caliente sino que está a una temperatura de en torno a 26°. Es perfecta para nadar un poco en un espacio único y solo por ver esta maravilla vale la pena visitar el balneario Gellert.

Esta piscina cubierta está rodeada de imponentes columnas art nouveau y balcones. El techo es de vidrio y deja que se cuelen tímidamente los rayos de sol. Es como si un lujoso salón de principios del siglo XX se hubiese convertido en una piscina, ¡así me sentí yo!

Además, hay una piscina exterior con una zona de olas artificiales abierta al público entre los meses de mayo y septiembre. La temperatura de esta piscina también ronda los 26° y es un buen sitio para seguir relajándote mientras respiras aire fresco.

Aparte de todo esto, al visitar el balneario Gellert podrás probar su sauna finlandesa (a casi 90°), las cámaras de aire caliente y los baños de vapor. Como podrás imaginar, nosotros salimos como nuevos.

¡Ah! Y el balneario Gellert ofrece dos extras que igual te interesan: una piscina privada para disfrutar en pareja y salas donde recibir un masaje (solo o en compañía) de 20, 45 o 60 minutos. Cualquiera de estos dos servicios se pagan aparte.

Entradas para visitar el balneario Gellert: reserva la tuya

Si me conoces de otros artículos sabrás que a mí me gusta viajar con mis entradas ya compradas con antelación. Así, al llegar, no tengo que esperar en taquilla y accedo directamente.

Por eso te recomiendo comprar ya la entrada para el balneario Gellert que compramos nosotros. Está al mismo precio que en taquilla (por cierto, varía si vas entre semana o en fin de semana) y te da acceso a la sauna, cámaras de aire caliente, baños de vapor y todas las piscinas.

Con la entrada normal tendrás acesso a los vestuarios comunes y una taquilla a tu disposición. Si lo deseas, por 3 euros más, tendrás una cabina privada donde cambiarte y dejar tus cosas.

Lo bueno, aparte de que entrarás nada más llegar sin hacer colas, es que pagarás online de forma segura y en euros, sin soportar así ninguna comisión por pagar en otra moneda.

No tienes que indicar hora, solo el día que quieres ir. ¡Es muy cómodo! Y con esta entrada podrás quedarte todo el tiempo que quieras:

Horario para visitar el balneario Gellert

Puedes visitar el Gellert los siete días de la semana. Las instalaciones abren a las 9 y cierran a las 19 horas (la zona de las piscinas cierra a las 18.40 horas). El acceso a la sauna está permitido entre las 10 y las 18 horas.

Recuerda que la piscina exterior solo está abierta entre los meses de mayo y septiembre.

Cómo llegar al balneario Gellert de Budapest

Como te comenté al principio del artículo, podrás visitar el balneario Gellert en la orilla de Buda. En mis rutas por Budapest en 3 días o por Budapest en 4 días te recomiendo acercarte al balneario después de ver monumentos de Buda como el Castillo de Buda, la iglesia de Matías o el Bastión de los Pescadores. Podrás llegar caminando en 30 minutos o coger el tranvía.

Si estás en el barrio judío, también tienes fácil llegar caminando a este balneario en unos 20-25 minutos cruzando el Puente de Elisabeth o el Puente de la Libertad.

En el caso de que estés más alejado de Buda, lo más aconsejable es que te apoyes en el transporte público para llegar al balneario o que te compres un billete de bus turístico de Budapest. Es genial para explorar la ciudad y tiene una parada en el balneario Gellert.

¿Vale la pena visitar el balneario Gellert? Mi opinión

En Budapest hay varios balnearios entre los que elegir pero yo no tengo ninguna duda de que el balneario Gellért es uno de los más especiales sino el más especial. Desde que llegas y ves su magnífica fachada, entiendes que estás en un lugar único.

La instalaciones, arquitectónicamente hablando, son algo digno de ver. Bañarte en sus piscinas termales y su piscina cubierta tiene mucho de reconstituyente pero también algo de hipnótico.

Un punto más a favor de visitar el balneario Gellert aparte de su decoración es que estos baños son mucho más tranquilos que el balneario Széchenyi, el otro más famoso de la ciudad.

Yo he estado en los dos y, aunque el balneario Széchenyi también me encanta porque sus instalaciones son enormes, siempre está mucho más lleno y, paz lo que se dice paz, no se respira demasiada, a no ser que vayas en las horas de menos afluencia.

Sí es verdad que la piscina exterior de Gellert no se puede comparar con las piscinas exteriores de Széchenyi. La piscina exterior de Gellert no es de agua caliente, mientras que en Széchenyi podrás disfrutar de dos piscinas de agua caliente al aire libre.

De todos modos, mantengo que las piscinas termales cubiertas del balneario Gellert son insuperables. Por su calma, sus mosaicos y sus techos.

La atmósfera de estos balnearios es muy diferente. Ahora bien, yo también visitaría el balneario Széchenyi en mi viaje a Budapest porque ambos valen la pena.

Venga, apúntate a este superplan de dar un paseo por los preciosos monumentos que ver en Buda y luego pasar unas horitas a remojo con esta entrada al balneario Gellert.

Consejos previos a visitar el balneario Gellert

Unos últimos consejos antes de tu visita a este balneario:

• Lleva traje de baño, chanclas y gorro a la capital húngara. Son obligatorios para disfrutar del balneario Gellert. Si no tienes alguna de estas prendas puedes comprarla en las instalaciones.
• Si vas al balneario con maletas, compra una entrada con cabina privada para dejar el equipaje. Si sois dos, bastará con reservar solo una cabina privada.
• El acceso a las aguas termales y a la sauna solo está permitido a personas de más de 14 años. Los menores de esta edad solo podrán usar la piscina cubierta o exterior si saben nadar.
• Para recibir masajes, tienes que tener más de 18 años.
• Si vas con niños, se recomienda no perderles la pista y mantener un tono de voz bajo para no interrumpir la calma del resto de bañistas.

Ahora que has leído mi experiencia, ¿te animas a visitar el balneario Gellert? Nosotros pasamos un tiempo estupendo aquí. ¡Estoy segura de que te encantará!